Zelaya reundido con los que cruzaron las montañas - Evaluación del frente interno y del internacional -Segundo día de la huelga general - 15 retenes militares, bolsas de arena, vuelo de helicopteros entre Tegucigalpa y la fronteraLas Fuerzas Armadas del Gobierno golpista empezaron a arremeter este viernes contra los manifestantes que viajaron desde distintas localidades del país hasta la frontera con Nicaragua para recibir al presidente legítimo, Manuel Zelaya.
La Policía empezó a lanzar bombas lacrimógenas para despejar el área en el departamento de El Paraíso (sur), miembros de la Policía y las Fuerzas Armadas dispararon. Y una persona resultó herida. Las acciones de fuerza comenzaron minutos después que los golpistas adelantaran el toque de queda a las 12.00 horas.
Mas temprano, los movimientos sociales rompieron el bloqueo policial que se mantenía en el departamento de Paraíso y continuaron su paso hacia la frontera con Nicaragua con el fin de recibir a Manuel Zelaya. La fuerzas militares se vieron obligadas a retroceder tras la cantidad de personas que se concentraron en este punto y los manifestantes decidieron no enfrentarlos y cruzar por las montañas aledañas donde hay varios caseríos.
Los oficiales bloquearon con bolsas de arena las carreteras para que los vehículos no pudieran continuar hacia la línea divisoria entre las dos naciones. El Ejército de Honduras mantiene bloqueada la frontera con Nicaragua, mientras más de cinco retenes de policías y y tropas de elite se encontraban a escasos diez minutos de la frontera de Las Manos. No dejan transitar vehículos que se dirigen a la concentración en la frontera.
Los manifestantes denunciaron: "los retenes militares los tenemos que evadir, la policía nos da paso en algunos casos".
Paralelamente, se cumple en el país centroamericano el segundo día de un paro general que mantienen tres centrales sindicales, apoyado con bloqueos de carreteras de las fuerzas populares
El presidente de la Federación Unitaria de Trabajadores, Juan Barahona, ofreció un balance de la primera jornada calificada como exitosa , tomando en cuenta los bloqueos carreteros y la toma de varias instituciones estatales por los trabajadores. Incomunicaron los principales puertos del país, tanto en la costa Atlántica como del Pacífico y a la capital con las zonas del norte de la nación.
Un nuevo problema se le presentó al gobierno a los golpistas, por el descontento de la policía por atrasos de pagos salariales, que llevaron a una huelga a agentes de una estación capitalina. Trataron de restarle importancia al asunto, al asegurar que sólo se trata de problemas administrativos. Agentes entrevistados por el canal 36 de la televisión, el único con postura crítica al golpe, dijeron que no atenderán requerimientos mientras no sean cumplidos sus reclamos.
Los problemas en ese cuerpo represivo, que incluyen al escuadrón especial Cobras, se suma al aislamiento internacional del régimen y la ola de repudio popular, que este viernes cumple su vigésimo séptima jornada. Los dirigentes del Frente Nacional contra el Golpe de Estado subrayaron que las luchas populares proseguirían hasta la derrota de los golpistas y la restitución del orden constitucional y de Zelaya.
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