martes, 12 de mayo de 2009

No a las fumigacione aéreas!

foto Oscar Paciencia
JORNADA DE SOLIDARIDAD CON CAMPESINOS E INDÍGENAS BARÍ DEL CATATUMBO

Post Mailer Mattie
Al pueblo colombiano. A los pueblos indígenas y afrocolombianos. A las organizaciones campesinas, sociales y culturales.

Los campesinos e indígenas bari de la región del Catatumbo, en el departamento de Norte de Santander, han iniciado una lucha desde la dignidad. Una lucha que es nuestra también, de estudiantes, de trabajadores, y de desempleados, es una lucha de todos los humildes que dicen la palabra: ¡basta ya!Esa lucha es nuestra, la del pueblo vivo.

Indígenas, afrocolombianos y mestizos. Es la lucha de los oprimidos.Nuestra lucha es por permanecer en el territorio. Y el mal gobierno militariza y nos desplaza.
Nuestra lucha es por un desarrollo propio.Y el mal gobierno propone asistencialismos y limosna.
Nuestra lucha es por la paz dialogada y de entendimiento.Y el mal gobierno ofrece guerra destrucción y discordia.

Nuestra lucha es por la vida.Y el mal gobierno trae muerte con megaproyectos.
Nuestra lucha es por concertar una salida a los cultivos de uso ilícito.Y el mal gobierno fumiga, envenena, nos criminaliza y mata nuestras tierras.
Nuestra lucha es por la tierra, los derechos humanos y la soberanía alimentaria.Y el mal gobierno nos trae falsos positivos, cementerios y explotación de carbón.
No quieren que seamos campesinos, desplazados nos quieren
No quieren que seamos indígenas, muertos nos quieren.

No quieren que tengamos dignidad, humillados nos quieren.Cambian vida, por multinacionales,Territorio y naturaleza por explotación de carbón y riqueza para unos pocos.
No quieren que seamos hermanos, enemigos entre colombianos nos quieren.
Y sin embargo nuestra lucha es hoy palabra viva, acción y resistencia.

El Colectivo Siembra acompaña al campamento humanitario “No a las fumigaciones aéreas y la erradicación manual, sí a la vida y al desarrollo propio”, que los campesinos e indígenas organizan para resistir a las criminales fumigaciones, y permanecer en le territorio, evitando así el desplazamiento que tanto le conviene al mal gobierno, pues así pude vender lo sagrado: la tierra a las multinacionales para que se lleven el carbón, el agua y los recursos, y con ellos la vida, la naturaleza y la cultura.

Invitamos a las organizaciones sociales, y a las personas en general a acompañar y a hacer visible la situación de crisis humanitaria de los campesinos catatumberos e indígenas bari, a poner sus manos, y sus esfuerzos, para hacer del campamento humanitario una salida que les permita a las comunidades una solución real al problema social de los cultivos de uso ilícito, que les permita a los habitantes de la región un desarrollo propio, con soberanía alimentaria, vida digna y paz.

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