Los líderes de las principales patronales agropecuarias argentinas confirmaron este viernes por la noche, a través de un comunicado de prensa titulado "el campo busca soluciones y paz social", que la huelga en la comercialización de granos emprendida desde hace tres meses culminará el domingo próximo a las 24H00 locales.
La cúpula de la Iglesia Católica había pedido el jueves a los agricultores levantar la protesta que consiste en no vender en el mercado interno granos destinados a la exportación, y solicitado al gobierno convocar con urgencia al diálogo a los agricultores.
Al pedido de la Iglesia se sumaron sindicatos del sector agroindustrial, voceros de la industria y representantes políticos, como el socialista Hermes Binner, gobernador de la provincia de Santa Fe, importante productora de granos y leche en la rica región central de Argentina.
El conflicto agrario estalló cuando el gobierno decretó retenciones (impuestos) flotantes a las ventas externas, que para la soja aumentaron de 35 por ciento a 41 por ciento, y pueden subir más si los precios internacionales continúan creciendo.
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