Vamos a los hechos. Desde que Chávez asumió el gobierno por las urnas en
1999, fueron realizadas dieciocho elecciones. Dos de ellas perdió el gobierno. La oposición derechista gobierna tres estados importantes. Fue el país del planeta que más elecciones directas realizó en toda la historia.
Saldrían del país, en el último año, alrededor de 30 mil venezolanos para Colombia y Brasil. Pero hay en Venezuela 3 millones de colombianos y más de 15 mil haitianos. Venezuela es un gran importador de alimentos, y quienes importan son empresas privadas y el gobierno. Nunca se gastaron tantos dólares en comida como ahora.
De abril a agosto de 2017, la derecha adoptó la táctica ucraniana de producir el terror. El miedo, el caos, para provocar un golpe, intentando dividir las fuerzas armadas y pidiendo intervención militar extranjera! Adoptó las más diversas formas de violencia física y social, siguiendo los manuales de la CIA. Todo era ejecutado por jóvenes mercenarios y lúmpens, pagados en dólares. Mataron, en ese proceso 95 personas. Cinco fueron muertas por las fuerzas del orden y eran chavistas, asesinados por los mercenários.
La respuesta del gobierno fue convocar una constituyente, para repactar la sociedad. El pueblo entendió y se sumó de forma masiva. Aunque la participación no fuese obligatoria, participaron 8 millones de electores, la mayor participación de los últimos veinte años. Con la elección de la constituyente, el pueblo derrotó politicamente el terror y la táctica ucraniana.
La oposición se retiró de las calles con sus mercenários y participó con sus euros y dólares de las elecciones para gobernadores el día 22 de octubre (15 de octubre).
Pero el imperio no se aquietó, y Trump amenazó con bloqueo económico, naval e invasión militar! Santa paciencia! El emperador bocón no conoce al pueblo de Venezuela, ni a América Latina, ni las leyes internacionales. Esa amenaza apenas sirvió para crear una cohesión aún mayor entre las fuerzas armadas y el pueblo venezolano. Y una agresión militar llevaría a millones de trabajadores de toda América Latinaa a manifestarse.
En el fondo, la disputa no es por el gobierno Maduro, la disputa es por la renta petrolera, que durante todo el siglo 20 fue apropiada indebidamente por las empresas estadounidenses y por una minoría de oligarcas venezolanos, que vivían como marajás! Y eso acabó.
La obligación de todos los militantes, de todos los movimientos populares y partidos de izquierda es defender el pueblo de Venezuela y el proceso bolivariano.
O asumir que está del lado del imperio y de sus aliados mercenários dentro de Venezuela! En Brasil, los movimientos populares y partidos políticos nos articulamos en más de sesenta entidades en el comité Paznavenezuela (Pazenvenezuela), para manifestarnos y apoyar de todas las formas posibles la paz en aquel país. Usted puede adherir, entre en la página con el mismo nombre, y promueva actividades de solidaridad en su espacio social de actuación. Ya los golpistas, su prensa y algunos oportunistas, siguen vomitando mentiras, como si tuviesen alguna moral de criticar y algún gobierno de otro golpista.
La historia no falla, y en el futuro las generaciones sabrán quienes eran los golpistas y mercenários al servicio apenas del capital estranjero.”
João Pedro Stedile es coordinador del MST (Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra) y de la Vía Campesina Brasil
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