Los presidentes Cristina Kirchner y Luiz Inácio Lula da Silva recibieron la propuesta para que el flujo comercial bilateral sea transado en pesos argentinos o reales brasileños
Argentina y Brasil llegan el martes a la Cumbre del Mercosur de San Miguel de Tucumán (Argentina) listos para eliminar el dólar de sus transacciones comerciales y realizarlas en sus propias monedas nacionales.
El paso es considerado un hito hacia la moneda única, una meta -hasta ahora utópica- que viene siendo mencionada en el Mercosur (fundado en 1991) desde hace más de 10 años.
La iniciativa fue emprendida en julio de 2005, y llevó casi tres años diseñar los sistemas de compensación monetaria que aplicarán los Bancos Centrales de los dos países.
"La arquitectura técnica está concluida. Sólo falta el aval político de los presidentes. Tal vez en la Cumbre de Tucumán se haga algún anuncio", dijo una fuente del ministerio brasileño de Hacienda.
El gobierno brasileño implementó el viernes un sistema de pagos en monedas locales del Mercosur, y Argentina dijo tener todo listo para poner ese instrumento en práctica.
Brasil estima que los nuevos procedimientos comerciales con Argentina podrían ser aplicados desde agosto o septiembre.
Argentina y Brasil consideran que será una "experiencia piloto" a la cual podrán adherir los demás miembros del Mercosur, unión aduanera que completan Uruguay y Paraguay y a la que Venezuela está en proceso de incorporación.
Argentina y Brasil concentran 80% del comercio del Mercosur. En 2007 su intercambio fue de unos 25.000 millones de dólares y se espera que este año crezca a unos 30.000 millones, según estimaciones de ambos gobiernos.
"Argentina ha completado la adecuación normativa para iniciar las transacciones comerciales entre Argentina y Brasil usando la moneda local, es decir, pesos y reales, sin tener que reconvertir al dolar", dijo Eduardo Sigal, secretario para integración latinoamericana de la Cancillería argentina, en Buenos Aires.
Brasilia y Buenos Aires coinciden en que las exportaciones se podrán hacer con mayor simpleza y se eliminarán los costos financieros que implican las conversiones de dólares a pesos o reales.
Ambos países dijeron haber tomado en cuenta que los empresarios -especialmente los pequeños y medianos- pagarán mucho menos en tasas de intermediación cambiaria.
Los costos bancarios y financieros de las transacciones argentino-brasileñas se reducirían hasta en 2,5%.
No hay comentarios:
Publicar un comentario