No reconocerán "ningún gobierno que surja de esta ruptura inconstitucional".
Clarín (Argentina)
Los presidentes del Mercosur reafirmaron hoy su condena al golpe de Estado en Honduras al desconocer al gobierno de facto y considerar inválidos sus actos, incluido un eventual llamado a elecciones. La declaración final de la Cumbre (a la que no asistieron los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, ni de Ecuador, Rafael Correa), anuncia además que se solicitará a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que continúe adoptando todas las medidas para la tutela y defensa de los derechos humanos y las libertades fundamentales en ese país.
En de los temas dominantes de la Cumbre presidencial que ese bloque celebra en Asunción, Paraguay, los presidentes del Mercosur recalcaron que la restitución del depuesto Manuel Zelaya es condición indispensable para el restablecimiento de la democracia y, en ese sentido, agradecen las gestiones mediadoras del presidente de Costa Rica, Oscar Arias, y las de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Este grupo de países sudamericanos "no reconocerá a ningún gobierno que surja de la ruptura inconstitucional" porque considera "ilegal" a las autoridades que asumieron el poder el 28 de junio, desplazando a Zelaya. Del mismo modo, se solicita en ese documento encontrar una solución pacífica y democrática a la crisis política y se "exige la restauración inmediata, segura e institucional a sus funciones" del presidente Zelaya, "electo por la soberanía popular a través de las urnas".
Horas antes de la difusión del documento, la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, había propuesto un "pronunciamiento contundente" del Mercosur contra el golpe de estado en Honduras. "Deberíamos emitir un pronunciamiento contundente en este ámbito acerca de estas cuestiones, sin estridencias ni discursos panfletarios, pero con la certeza y precisión de que no podemos tampoco tolerar lo que sería una ficción", dijo Fernández.
La condena al golpe hondureño fue una posición unánime en la reunión de Paraguay, cuyo presidente, Fernando Lugo, dijo al abrir las deliberaciones: "¡Que nunca más, nunca más en territorio de América surja una dictadura que provoque el silencio de la muerte, de la voz o del hambre!".
En de los temas dominantes de la Cumbre presidencial que ese bloque celebra en Asunción, Paraguay, los presidentes del Mercosur recalcaron que la restitución del depuesto Manuel Zelaya es condición indispensable para el restablecimiento de la democracia y, en ese sentido, agradecen las gestiones mediadoras del presidente de Costa Rica, Oscar Arias, y las de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Este grupo de países sudamericanos "no reconocerá a ningún gobierno que surja de la ruptura inconstitucional" porque considera "ilegal" a las autoridades que asumieron el poder el 28 de junio, desplazando a Zelaya. Del mismo modo, se solicita en ese documento encontrar una solución pacífica y democrática a la crisis política y se "exige la restauración inmediata, segura e institucional a sus funciones" del presidente Zelaya, "electo por la soberanía popular a través de las urnas".
Horas antes de la difusión del documento, la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, había propuesto un "pronunciamiento contundente" del Mercosur contra el golpe de estado en Honduras. "Deberíamos emitir un pronunciamiento contundente en este ámbito acerca de estas cuestiones, sin estridencias ni discursos panfletarios, pero con la certeza y precisión de que no podemos tampoco tolerar lo que sería una ficción", dijo Fernández.
La condena al golpe hondureño fue una posición unánime en la reunión de Paraguay, cuyo presidente, Fernando Lugo, dijo al abrir las deliberaciones: "¡Que nunca más, nunca más en territorio de América surja una dictadura que provoque el silencio de la muerte, de la voz o del hambre!".
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